En Singapur, es posible pasar una tarde maravillosa, cosa que me encantaba hacer en uno de mis viajes a Barcelona, aventurándose con la familia por lugares maravillosos como la Isla Sentosa, a la cual se llega en el Sentosa Express desde la estación de VivoCity.

En la Playa Siloso se pueden practicar varios deportes, como canotaje, andar en bicicleta o simplemente observar cómo juegan voleibol los que estén en la playa, sentados desde alguno de los numerosos cafés que se encuentran ubicados sobre la playa.

Si quieres recrear viejos tiempos, debes ir al Fuerte Siloso, donde se hacen recreaciones de los años de guerra que vivió Singapur, con aromas y ambientación real de aquellos tiempos, que casi te sentirás participe de la guerra.

Como comentario adicional al circuito de aventura y playa que les describo, creo que lo mejor para conocer la ciudad en todo su esplendor es tomar un crucero nocturno, que llevará a conocer los impactantes rascacielos de Singapur y además degustar exquisitos platos típicos a bordo.

A los niños siempre les gusta visitar lugares que exhiben animales y especies exóticas, para eso, está el Underwater World, donde pueden tocar y sentir de cerca a los tiburones, además de verlos comer y nadar tranquilamente en las aguas del acuario. Desde este lugar se puede tomar un tranvía de regreso a Harbourfront Centre.

Para terminar el circuito de aventura, visiten el Parque Mount Faber, con grandes extensiones de terrenos para caminar y deleitarse observando las vistas panorámicas que ofrece esta selva tropical natural, exhibiendo paisajes únicos e irrepetibles que quedaran plasmados por siempre en la memoria.

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