En el 1800 en Gran Bretaña había un gran poder imperial con las colonias de todo el mundo. En ese entonces era un “Imperio donde el sol nunca se pone”.
En el extremo este, hacia el extremo sur de la Malaya, muy cerca del ecuador se encontraba la isla de Singapur. La ubicación de esta isla tenía una importancia estratégica para el poder imperial porque por allí pasaban las principales rutas marítimas.
Singapur, tras el desembarco de Sir Stamford Raffles, ha pasado de ser un sitio totalmente desierto, de poco interés e importancia para nadie a convertirse en un ajetreado puerto comercial. También se ha convertido en una estación de carbón muy importante para la Marina Real y los buques mercantes.
Cuando el gobierno británico tomo consciencia de la importancia estratégica y comercial de Singapur, decidió modernizar las existentes defensas antiaéreas de la isla. Se instalaron además armas de largo alcance. Se construyeron también varias nuevas fortalezas en la costa con artillería que modernizara la ya existente. Muchas de las más grandes fortalezas se encontraban en una mala posición de fuego, con una capacidad de ser ampliada no realista.
Antes de la Segunda Guerra Mundial, la vista aérea de Blankang Mati y Pulau Brani muestra la ubicación de las nuevas fortalezas costeras de artillería construidas en esta isla. Estas fortalezas, con excepción del Monte Imbiah y el Fuerte Teregah, fueron actualizados y remodelados durante su vida útil de servicio.
El Fuerte Teregah fue abandonado durante el siglo XX. El resto, con la excepción de Siloso, no se volvió a utilizar hasta después de la Segunda Guerra Mundial. Lo que se puede decir es que todos estos fuertes no fueron verdaderas fortalezas en el verdadero sentido de la palabra. Solo una fortaleza verdadera fue construida en Singapur, y esta fue el Fort Tanjong Katong.
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